SUSTANCIA SOLAR

Es una pieza interactiva. Un cuerpo pictórico flexible hecho de setenta y seis litros de vinílica derramada y seca, colocada sobre una base de madera que se asemeja a una cama. El espectador se podrá introducir en ella para sentir su peso y podrá moverse como si se tratara de una cobija. Es una experiencia introspectiva. Vista desde afuera parecerá un cuerpo viviente, una pintura en movimiento. Se realizarán continuamente registros de foto y video a lo largo de interacción durante el período de exposición. Esto conformará otra la parte de la obra, el registro de lo vivido, ya que al final, la mancha regresará al muro convertida en cuadro doblado, será una pintura sin soporte sobre bastidor de madera marcada por las huellas que habrán dejado los espectadores al moverla. 

Esta pieza forma parte de la primera etapa de su investigación sobre pintura contemporánea en la que parte del concepto de pintura expandida. Crea cuerpos, pieles o manchas irregulares, formas, que surgen de la materia líquida de la pintura derramada y que al secarse se independizan de la superficie para poder interactuar con ellas en el espacio. Esta exploración surge del  interés por el fluir de la materia donde la gravedad, el clima y la superficie, determinan su contorno y su forma. La parte lúdica y el azar, así como el permitir los accidentes, son elementos importantes en su trabajo. Le interesan las formas básicas y elementales para llegar a lo esencial que nos conforma como vida. La proporción de la mancha en relación al cuerpo humano le da un carácter envolvente y lúdico.

Este proyecto ha sido realizado gracias a la beca del Sistema Nacional de Creadores de Arte, FONCA.