Trabaja en muchas disciplinas, pero el dibujo es el núcleo de su práctica, lo usa principalmente para la investigación más que para crear trabajos terminados. Proporciona un espacio para entender los patrones dentro de la situación que está viendo, a través de lo que observa y las conversaciones que genera. Su obra explora el ritual, se siente atraído por los actos que creamos o aprendemos y que luego repetimos. Actualmente vive en la ciudad de Querétaro.
Antes de irse de Londres hacia México, Liam fue cartero durante varios meses, empujando todos los días un carro lleno de cartas y paquetes por las calles. Llegando a México, le fascinó la diversidad de las formas de carritos que se empujan a través de la ciudad. Muchos de ellos están llenos de objetos envueltos en hojas de plástico que sugieren un espacio interior. Ha estado jugando con esta idea de espacio interior para crear cámaras oscuras que pueden moverse por la ciudad proporcionando un espectáculo cinematográfico.